Es lo que tiene el vivir del cuento,
que llega un momento
en el que no hay
un dios que le quite las botas al gato.
6 de febrero de 2010
El cuento II
se puede oler como:
cuentos asombrosos
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La noche que escape el querer de mis labios tu misma cara cerrará el poema
Es lo que tiene el vivir del cuento,
que llega un momento
en el que no hay
un dios que le quite las botas al gato.
3 comentarios:
Y si se las quitan es gato muerto.
A buen seguro, vivir del cuento es fácil, dejar de hacerlo... Pocos resisten.
Saludos.
Ni moraleja en la que recrearse...¿o sí?
Un abrazo
Mi Señora AnaR, (qué placer el encontrarla)
¿No le parece bastante 'moraleja' en la que se recrea ese gato?
Señoras, AnaRAna (ustedes dos juntas son palíndromo de cuento ;-)
No las besaré, miedo me da que se transformen en princesas o yo me vuelva sapo.
Suyo, Z+-----
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