Espero que reaccione
y que haga algo.
Y creo
que no hay nadie más guapo en este mundo,
lo creo
y le miro la boca
y entonces quedamos ahí su boca y yo,
y el resto,
el alrededor,
ya no se ve.
Hemos hablado
y me ha seguido mirando
de lejos
conmigo,
también ahí,
de cerca
interesado,
y me sonríe,
y todo mi mundo lo compone su dentadura.
5 de octubre de 2007
Hablando
se puede oler como:
gusto
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7 comentarios:
Excelente ese final!! La dentadura, toda una smbología, que para mi, lo mismo que para Freud, esconde nuestra sexualidad dormida. Un saludo desde Madrid, España. felicitaciones por tu blog!
Y su lengua que recorre tu dentadura...
Bs.
El mundo en un punto. En esa boca, dos hecha una, estallarán los dos.
Un abrazo, Ana.
Ya lo decía Bécquer: ...qué no te diera por un beso...-besos-
de palabras y de ojos. como tus dos blogs. como nuestros dos blogs. que uno has visitado. y que al otro te invitamos. www.pinturas-pm.blogspot.com
lindo. lindos. gracias
Este tipo de momentos, por llamarlos de alguna manera "momentos furtivos", son los que realmente componen nuestro devenir diario. Miradas sutiles, sonrisas, un gesto o simplemente el mirar un andar... Uno juega a veces con la posibilidad de que esa persona se vuelva y te mire, o te sonría. Lo diario está lleno de estos momentos, y esos momentos a su vez de deseos ocultos y muchas veces inconfesables.
Gracias.
seguimos con las palabras y los ojos. así comentamos tus comentarios a nuestras pinturas: "tus palabras hablan bien de tu ojo". gracias
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