Todas las estrellas te han sonreído esta noche
han visto que callas
que te caes de guapo
brillaban por ti hoy
en esta noche en la que no te veo
clavadas mis pupilas en el firmamento
he reido con ellas,
desde que no me dejas quererte
yo te sobrellevo,
es grande el cielo y lo que brilla
también lo es el amor que te tengo
pero qué importa eso
si todas las estrellas te han sonreído esta noche.
Bañadas en una dramática contradicción: la belleza estrellada del firmamento y lo inalcanzable de un amor, este texto rezuma un algo "naif" que me gusta.
ResponderEliminarGracias.
Me gusta cuando callas, porque estás como ausente...
ResponderEliminarParece que el silencio sube la guapura, ¿verdad?
Yo ahora no me callo y te mando esta sonrisa que ha disfrutado de tu poema y tu música.
Quizás el amor sea eso, Ana, dar sin esperar recibir. La forma mas sublime, y también la mas dura.
ResponderEliminarUn abrazo garnde.
Gabriel
Hay una sensación de infinitud entre líneas que ...agrada.
ResponderEliminarUn beso
"desde que no me dejas quererte
ResponderEliminaryo te sobrellevo"...
enorme verso Ana.
Un saludo.
Quizá seas tú quién las hace sonreir, así que sí importa...
ResponderEliminar:-)
Queda bonita la Luna azul.
ResponderEliminarAmores resignados a la pérdida...
ResponderEliminarEso verdaderamente es la evolución romántica de lo humano, la esencia del trovador y de la caballería andante.
La poesía amorosa nació donde usted ahora se encuentra.
Por eso le brillan las pupilas, el perdió, usted ganó.
Besos señora, Z+-----
también sobrellevas, ana. tú también...
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