14 de abril de 2008

Qué barbaridad

Tú cuando miras
¿piensas,
(...)
o solo miras?

Yo miro
cuando no me ves
[me lo enseñaste tú]
y te imagino
(...)
te imagino aquí al lado
y pienso,
(...)
pienso que te digo cosas
(...)
cosas como que
hoy he sido feliz un rato, unos diez minutos
tengo que tender una lavadora
cómo se cuelgan tus ojos
me lo tengo que montar por mi cuenta
(...)
pienso
cosas sin sentido, vaya
como que la próxima vez que te vea me tengo que acostar contigo.

5 comentarios:

  1. El punto de partida ¿piensas o solo miras? introduce ya el desarrollo del poema con ese yo que a la vez piensa y mira en un juego encadenado y ciertamente dinámico hasta caer en el sin sentido, telar de fondo del sentimiento amoroso. Ágil y dinámico, y a la vez cercano.
    Saludos

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  2. Ingeniosa fórmula para adornarla bellamente de palabras.
    Me ha gustado. volveré

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  3. Anónimo2:51 p. m.

    ¡Excelente!
    Yo digo siempre "qué barbaridad". Me divierte que una frase que me encargué personalmente de ajar sea el título de un poema (y tan bueno).

    Gracias por pasar por mi diario.

    ¡Saludos!

    Verónica

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  4. piensa, ana. como tú. piensa en lo mismo que estás pensando tú.
    abrazo.

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